LOS NIÑOS:
SU VULNERABILIDAD EN EL TRÁNSITO
Estos
hechos prevenibles son una de las principales causas de muerte para niños
mayores de 10 años. Los informes reclutados por la organización internacional
evidencian que las víctimas mortales por incidentes viales se producen en un 95
% en países de ingresos bajos y medios.
Los
niños son vulnerables debido a sus limitaciones tanto físicas, como cognitivas
y sociales.
En
comparación con el adulto, los niños están expuestos a padecer lesiones de
cráneo de mayor gravedad; pueden interpretar erróneamente imágenes y sonidos
que influyen en los juicios relativos a la proximidad, velocidad y dirección
provenientes de los vehículos en movimiento y pueden tomar decisiones de alto
riesgo especialmente en la adolescencia.
Medidas
tales como, establecer zonas de velocidad reducida (límite de 30 km/h)
especialmente alrededor de las escuelas son eficaces para proteger la vida de
los niños, lo cual también fortalece el cuidado de todos los usuarios
vulnerables de las vías y de la población en general.
Cabe
destacar que el niño como pasajero necesita viajar protegido. Para ello los
países deben aplicar las normas de seguridad de las Naciones Unidas a los
vehículos nuevos e introducir el uso obligatorio de los sistemas de retención
infantil ISOFIX.
Por
otro lado, el informe “Salve VIDAS” insta a los países a hacer cumplir las
leyes viales y a instaurar reglamentaciones que garanticen:
- el uso de cinturones de seguridad en micros escolares
- observar el
respeto a la velocidad y a
- conducir en estado de sobriedad.
La
supervivencia de un niño lesionado requiere de una respuesta traumatológica
ágil. Para ello es necesario formar a maestros y conductores de vehículos
escolares en la aplicación de técnicas seguras y rápidas para estabilizar los
traumatismos; poseer una dotación adecuada de ambulancias y equipamiento médico
para tratar niños como también evolucionar en los servicios de rehabilitación
en pediatría.